Mister Aspartame creó la siguiente entrada muy útil y me gustaría compartirla con ustedes...
-Las amistades no son subjetivas, ahora son un producto matemático, una mercancía. Según mi Facebook soy una excelente persona con casi 1000 amigos y más de 120 peticiones en espera.
-No me tutees, tuitéame.
-Facebook es, más que una red social, el nuevo lenguaje de la amistad. Tu y yo tenemos más de 30 amigos en común, ambos somos fans de Los Simpson, Pacman y de cantar en la ducha, además sacaste 32% en el test de “qué tan bien me conoces”.
-Ya no siento. Ahora anuncio que siento.
-No confío tanto en ti, pero igual estás en mi grupo de “Best friends” de Facebook.
-La amistad ya no es un bien inmaterial.
-Las 10 últimas veces que te he visto ha sido por Twitpic.
-Conozco personalmente solo al 30% de mis amigos de Facebook. Y sólo el 2% son mis amigos en la vida real.
-Narcisismo de las pequeñas diferencias: Soy más cool porque tengo más followers que tu y apenas sigo a 34.
-Ya no tengo nada que contarte. Todo lo que has leído en el Twitter es lo que hay.
-El Facebook es demasiado old fashion. Si no tienes Twitter no cuentes conmigo.
-No te llamé en tu cumple, pero te dejé un mensaje en el wall.
-El Facebook, Twitter o cualquier red social pronta a aparecer funciona como un RR.PP de mortales, comunes y corrientes, que excusa, miente y nos convierte en versiones de lo-que-queremos-ser de nosotros mismos. Fiesta de maniquíes.
-PING
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